La computación en la nube juega un papel central en el cuidado de la salud. Para empezar, almacena registros de salud electrónicos y los mantiene accesibles. Pero, los servicios de clínica en la nube también mejoran la eficiencia y respaldan los objetivos generales de la organización.

Tenga en cuenta que el uso de los servicios de clínica en la nube es uno de los primeros pasos necesarios para la transformación digital. Y los servicios de nube alojados no necesitan grandes inversiones en infraestructura. Por lo tanto, con pocas barreras de uso, los beneficios de los servicios de clínica en la nube se pueden aprovechar desde el primer momento.

Clínica en la nube: una necesidad para la buena atención de los pacientes 

Sin los servicios de clínica en la nube es más difícil conectar las historias clínicas de los pacientes a otros sistemas, como las herramientas de programación de pacientes y los programas de telesalud. Incluso las notas del médico y las lecturas del radiólogo se pueden analizar en la nube. Las bases de datos en línea proporcionan registros médicos y pedidos pendientes. Mientras tanto, la versión y el control de acceso brindan un registro de auditoría y reducen los errores.

A esto se suma que con los servicios de clínica en la nube se permite un enfoque centrado en el paciente. Brindar la atención adecuada en el momento y lugar adecuados beneficia a los pacientes y a los sistemas de salud. Además, dar acceso a los pacientes a los datos de salud respalda los objetivos centrados en el paciente. Sin embargo, las soluciones in situ no tienen la flexibilidad para cumplir este objetivo. Por otro lado, los servicios de clínica en la nube ayudan a los pacientes a administrar la atención médica, comunicarse con un proveedor de atención médica y realizar tareas relacionadas con la salud desde cualquier dispositivo conectado a Internet. Además, el acceso a los registros médicos respalda la continuidad de la atención y ayuda a los sistemas de salud a retener a los pacientes.

Las soluciones de almacenamiento auto-hospedadas imponen límites a la capacidad de datos. La expansión es costosa, tanto para la infraestructura como para los recursos de TI. Sin embargo, los servicios de clínica en la nube   proporcionan flexibilidad. Estas opciones permiten escalar hacia arriba o hacia abajo rápidamente para satisfacer la demanda. Los proveedores de la nube se encargan de las actualizaciones, los parches y la seguridad de los datos. No es necesario comprar hardware adicional ni pagar actualizaciones de software. Estas cualidades hacen que los servicios de clínica en la nube sean beneficiosos para los profesionales de la salud. Con una inversión inicial más baja, las empresas de salud pueden aumentar la capacidad de la nube sin agregar infraestructura física.

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